Esta mañana nos levantamos sabiendo que esto se acaba, es la penúltima etapa, como hace 8 días atrás volvemos a montar nuestras alforjas en la bicicleta bajo los 5 grados de temperatura. Queremos  hacer unos buenos kilómetros hoy para que mañana el gran día sea un paseo y disfrutemos sin sobresaltos.

Como se nota que estamos en Galicia, prados totalmente verdes, senderos de un sueño para cualquier biker que se precie y mucho ganado. En nuestro camino encontramos un árbol milenario y al mismo tiempo que me saco la foto me pregunto ¿Cuántos peregrinos abra visto pasar?, miles de historias que podría contar a lo largo de todos sus años. Como uno mas nos alejamos de el sabiendo que nosotros también formaremos parte de su historia.

Llegamos a Portomarin  sobre las 11.30 am, cruzamos el rio Miño y continuamos hacia Palas del Rey por asfalto ya que el camino  transcurre justo al lado, para no variar y seguir con  nuestra racha nos desviamos unos 10 kilometros, después de enmendar nuestro error llegamos a Palas del Rey y nos pegamos un buen almuerzo par continuar con la etapa.

Regresamos al camino prehistórico esta vez con muchos subes y bajas un autentico rompe piernas y con un día muy caluroso. Lo mejor del día de hoy ha sido que no hemos tenido averías mecánicas, creo que cumplimos el cupo. Sobre las 18:30 llegamos a Arzúa.